Desde las seis de la mañana, que abrió sus puertas el Panteón Yañez de Hermosillo, empezó a recibir familias y personas de todas las edades, dispuestas a visitar y depositar flores en las tumbas de sus mamás con motivo del 10 de mayo, día de las madres.
Al ser éste un día especial, de fiesta y celebración para el ser más querido, no dejaron pasar la fecha para acompañarlas pese a su ausencia física, y por supuesto cantarle las mañanitas y su canción preferida, como lo hicieron Martín y Belem Zazueta en la tumba a su madre Isabel.
La mayoría de los visitantes aprovecharon el fresco de la mañana, conscientes de que el calor que se siente en la ciudad ya es fuerte a partir de la diez de la mañana.
Otros más que no son originarios de esta capital, visitaron el camposanto acompañando a otras personas, amigos y conocidos con la intención de sentir que igual visitaron este 10 de mayo, la tumba de su mamá; como sucedió con Raúl García que es de Guadalajara, tierra donde descansan los restos de su señora madre.
Aunque este panteón, uno de los 5 que tiene el municipio, se apreció en orden debido a las jornadas de limpieza que se realizaron en días previos, se presentaron quejas por que las puertas laterales del lugar no se abrieron, lo que obligó a las personas a caminar cerca de un kilómetro hasta la puerta principal, entre ellos adultos mayores.
Para mantener el orden y tranquilidad en el lugar, se contó con la presencia tanto de tránsito y policía preventiva municipal, que con recorridos tanto del interior como a los alrededores del panteón se evitaron incidentes.
También ofrecieron apoyo de traslado hasta las tumbas a personas con alguna discapacidad y adultos mayores que no quisieron faltar a acompañar por un rato la tumba de sus mamás.